domingo, 4 de mayo de 2008

Un cuento feliz (1)



Pues para que veáis que también hay cuentos felices, que no todo va ser sufrir :)


Teresa y el oso (cuento sinfónico).

(Versión discográfica, Noviembre de 1976 – Volúmen 4. MM: Marcos Mundstock).
(Texto de la contratapa del disco).

Para la grabación del cuento sinfónico Teresa y el Oso de Johann Sebastian Mastropiero, Les Luthiers contrataron a 61 personas: 60 profesores de orquesta y uno de zoología. La limitada capacidad del estudio de grabación condicionó interesantes soluciones de espacio: un flautista delgado dentro de una tuba, el platillista como abrazado a un fagot, una oboísta a babuchas del timbalista, siete violines en el vestíbulo, los cuatro cornos desde sus casas por teléfono y la arpista en el bar de enfrente, lo que obligó a llevar su micrófono hasta allí y a pagarle un café con leche.

Salvo la princesa Teresa, que se identifica con el quinteto de cuerdas de la sinfónica, los otros personajes de Teresa y el oso están representados por instrumentos informales ejecutados por Les Luthiers.

En orden de aparición:

Pajarillo Amarillo: Tubófono Silicónico Cromático
Jabalí Alí: Alt-pipe a vara
Molusco Pardusco: Gom-horn da testa
Mariposa Golosa: Dactilófono
Oso Libidinoso: Glamocot
Bruja Granuja: Glisófono Pneumático
Tres Gansos Mansos: Kazoos
Bajos Instintos: Bass-pipe a vara
Vaca Resaca: Yerbomatofono d'amore

Narrador: Marcos Mundstock:

Aquella, habría sido una tranquila mañana de otoño en el bosque, una mañana de otoño común y corriente, si no fuera que ya eran las cuatro de la tarde y estaban en verano.

Todos los animales habían sido citados por la princesa Teresa en un claro del bosque para averiguar cual de ellos era su prometido, el duque Sigfrido el Erguido.

El duque, había sido hechizado por la bruja Granuja, que no sólo lo había transformado en algún animal del bosque, sino que además, le había quitado la memoria.

El pajarillo Amarillo, cantaba alegremente. El pajarillo decía: “Solo el amor de la princesa puede devolver la forma humana al duque”.

En ese momento, se presentó el jabalí Alí. El jabalí preguntó: “¿Por lo de la princesa es aquí?”

“Si”, dijo el pajarillo” Nos han citado a todos. A propósito, ahí viene, arrastrándose, el molusco Pardusco”.

El molusco preguntó: “He perdido mi caparazón. ¿No lo vieron?”

En ese momento, apareció volando la mariposa Golosa. “¡Socorro!”, se quejaba la mariposa, “¡Me persigue el oso Libidinoso!”, y apareció corriendo tras ella, el oso Libidinoso.

El oso, perseguía a la mariposa ofreciéndole una margarita y recitándole un poema que decía: “¡Sublime éxtasis de amor, mariposa, que acelera mis latidos, vayamos, vayamos, vayamos, vayamos, vayamos pronto!”.

El molusco se interpuso. El oso bramó: “¿Y tú que quieres, despreciable molusco?”
“¿No vio mi caparazón?”

El instante fue aprovechado por la mariposa Golosa, que se escondió ayudada por el pajarillo Amarillo.


(Continuará)

4 comentarios:

Suntzu dijo...

De momento, pinta bien. ¿Para cuándo la segunda parte?

KUKA dijo...

Verdaderamente genial, gracias.

Unknown dijo...

Uy!, que bien me viene esto, a ver cuando lo sigues, no te hagas mucho de rogar.

Besos

Regina dijo...

Jajajajaja.

Una cosa, Tupp: porfa, no nos pongas las melodías/canciones/sonidos que empiecen solos. A veces entro al blog y parece una discoteca, con 3 cosas sonando a la vez y tengo que buscar cuál es el reproductor que se ha puesto en marcha xDD.